LA SIEMBRA



LA SIEMBRA

Llegaran días de siembra, y tardes de cultivos, junto al trigo verde de primavera, sentada bajo el árbol de la vida, ya serena por el tiempo vivido, allá en el centro, en tierra de nadie, aunque allí nacieran mis hijos, aunque allí se pasara más rápidamente mi vida.

Y viviré feliz esperando las tormentas, y paseare por las doradas arenas de mi mediterráneo querido, persiguiendo mi horizonte, sin poder jamás alcanzarlo para no morir nunca, volando junto a las gaviotas, sintiendo mi alma perdida como techo.

Ahora vivo mi tiempo, pescando atardeceres, con la mirada serena, con el sol escondiéndose frente a mí, con la promesa de un nuevo día mar adentro, sin miedo a las tempestades, sin miedo a nada.

UN COPO DE NIEVE



 UN COPO DE NIEVE

Hace un tiempo alguien me pregunto ¿Cuánto pesa un copo de nieve? Yo le comente que nada, entonces me respondió ¿y porque se rompen las ramas de un árbol después de una gran nevada?

Entonces pensé en lo que habíamos hablado antes del ejemplo. Ella quería separarse de su marido por cosas pequeñas que sucedían en su matrimonio, y yo le decía ¿si son pequeñas por que no lo solucionas? Y ella me decía… son tan pequeñas…

Pero es que llegado ese momento, en su vida había habido grandes tormentas, las cosas grandes se habían solucionado, y las pequeñas aun seguían agarradas a las ramas del sentimiento y al igual que los copos de nieve, las ramas de la indiferencia se iban doblando como el desamor y la rabia.

Y es verdad que las pequeñeces se dejan en algún lugar de la vida, semi olvidadas, hasta que un día la rama se rompe, y nadie es capaz de volver a dejar la rama como estaba, igual que la convivencia anterior, cuando todo era mas llevadero.

MI LEGADO


MI LEGADO

Estas son mis sensaciones al estar a tu lado, sintiendo como se pasea el Otoño por mi vida, acariciada por las hojas de tus manos, y arropada por el calor de tu cuerpo.

Viendo como llega la tormenta que tanto me gusta, sintiendo el relámpago de tus ojos, el mágico sonido de tu voz retumbando junto a mis oídos como el trueno, y tu cálida lluvia cayendo en mi pecho, así es la tormenta que añoro, que siento y que extraño cuando no estas.

Darte la mitad de una manzana, sentir el olor de una naranja al quitarle le piel con mis manos, comer gajo a gajo, junto al aroma de tu cuerpo, y sentir como entra en mi garganta su suave y dulce jugo.

Compartir mi mesa, mi comida sencilla, la fruta del tiempo, mi armario, mi ducha y mi lecho, el día y mi noche, mis paseos por retiro, y mi descanso junto a ti, esa es mi inmensidad, ese es mi legado...

POEMAS SIN VERSOS



Atascados mis dedos en poemas sin versos,
sin piedad me mira el papel vacío.
Quebrado en ronco silencio,
sangra el aborto de mis letras vanas.


Mercedes Ridocci



A veces el camino es volver a empezar...

NOMBRES INNOMBRABLES







Nombres innombrables,
cuerpos intangibles de cálido tacto
abrazan la etérea pesadez de su ansia,
rocían saliva de furia serena,
certero delirio y sincera mentira.

Mercedes Ridocci


AULLIDO SOLITARIO

Escultura de Auguste Rodin



En el caos de la pasión oculta
se agolpan los deseos,
sobre ave de mutiladas alas,
se extienden en ávido vuelo,
rompen en el húmedo abismo
de un aullido solitario.


Mercedes Ridocci



UDOL SOLITARI


En el caos de la passió oculta
s'amunteguen els desigs,
damunt d'au d'ales mutilades,
s'estenen en vol àvid,
trenquen en l'humid abís
d'un udol solitari.


Traduïda al català per Pere Bessó



  
 Comentario de Pere Bessó adjunto a la traducción.

Estimada Mercedes:
Los deseos son aves solitarias como bestias hambrientas que aúllan en ambos territorios: el de las alturas, el de los abismos. No importan entonces ni las alas ni las garras fuera del juego de todos, que nos toca soportar en desplacer, hasta sumirnos -como bien señalas en el primer verso: en el caos de la pasión oculta...
Mis respetos,
Pere




UNA PERSONA SENCILLA


UNA PERSONA SENCILLA

Soy una persona que le gustan las estrellas como techo, y la hierba como lecho, la fruta del tiempo para alimentarme, y el agua de un cercano río para aliviar mi sed.

Y vivir al amparo de la naturaleza, sin mas prisas que el caer de las hojas en otoño, y la ropa tosca de algodón para vestir mi cuerpo.

Necesito pocas cosas para vivir en paz, con una vida sencilla, y alguien que me quiera de vez en cuando, sin que mi cuerpo necesite mas calor que el de un abrazo, y el olor de tu pelo en el viento.

Seria lo mejor de la vida ver pasar el río, aunque a veces necesite el azul del mar, y el arrullo de las olas, y mis pies pisando la arena.

PUZZLE


PUZZLE

No estoy acostumbrada a verme desposeída de las palabras para describir cosas que he sentido.

Me siento en el punto álgido de mi alteración emocional , muy receptiva y esta vez  estas mas  cerca.

Me siento  esperanzada y fascinada en medio de un arrebato, cálidas miradas como el sol de otoño,  lluvia de mayo para la sed del alma,  mares azul cielo sin horizontes, de esperar lo que nunca llega.

Ahora somos como dos piezas de un puzzle, diseñadas para llenar el vacío del otro, sintiéndonos en las sombras, reconfortándonos  mutuamente por el hecho solamente de estar juntos, nos adaptamos el uno al otro de forma sorprendente,  la unión parece inevitable, pero el puzzle quizá nunca se habría resuelto si las dos mitades  no se hubieran encontrado en el mismo lugar y al mismo tiempo.

Mi alma se debate en una agitación mayor, ella siempre ha  estado tan vacía como yo, me he movido por la vida sin preocuparme por los espacios vacíos de mi corazón pero me doy cuenta de que una vida carente de alegrías podía desembocar en la desesperación al  paso de los días, sin tener en quien confiar, eso ha  hecho que mi alma  se renueve, y no se consumiera hasta marchitarse, esperando tu llegada.

Tras muchos años de haber enterrado secretos que me preocupaban, ningún confidente puede entonces traicionar las palabras que no dijiste.

Solo tu puedes entonces exhumar secretos a salvo en la tumba de la memoria . En el mundo real como en los sueños, nada es realmente lo que parece.

Es  algo maravilloso y terrorífico a la vez , impresionante y extraño, espantoso y excitante. Creo que solo esta empezando y se que este es el lugar.





Cuando las Cabezas de las Mujeres se juntan alrededor “del fuego”


Simone Seija Paseyro Uruguaya

Alguien me dijo que no es casual…que desde siempre las elegimos. Que las encontramos en el camino de la vida, nos reconocemos y sabemos que en algún lugar de la historia de los mundos fuimos del mismo clan. Pasan las décadas y al volver a recorrer los ríos esos cauces, tengo muy presentes las cualidades que las trajeron a mi tierra personal.

Valientes, reidoras y con labia. Capaces de pasar horas enteras escuchando, muriéndose de risa, consolando. Arquitectas de sueños, hacedoras de planes, ingenieras de la cocina, cantautoras de canciones de cuna.

Cuando las cabezas de las mujeres se juntan alrededor de “un fuego”, nacen fuerzas, crecen magias, arden brasas, que gozan, festejan, curan, recomponen, inventan, crean, unen, desunen, entierran, dan vida, rezongan, se conduelen.

Ese fuego puede ser la mesa de un bar, las idas para afuera en vacaciones, el patio de un colegio, el galpón donde jugábamos en la infancia, el living de una casa, el corredor de una facultad, un mate en el parque, la señal de alarma de que alguna nos necesita o ese tesoro incalculable que son las quedadas a dormir en la casa de las otras.

Las de adolescentes después de un baile, o para preparar un examen, o para cerrar una noche de cine. Las de “venite el sábado” porque no hay nada mejor que hacer en el mundo que escuchar música, y hablar, hablar y hablar hasta cansarse. Las de adultas, a veces para asilar en nuestras almas a una con desesperanza en los ojos, y entonces nos desdoblamos en abrazos, en mimos, en palabras, para recordarle que siempre hay un mañana. A veces para compartir, departir, construir, sin excusas, solo por las meras ganas.

El futuro en un tiempo no existía. Cualquiera mayor de 25 era de una vejez no imaginada…y sin embargo…detrás de cada una de nosotras, nuestros ojos.

Cambiamos. Crecimos. Nos dolimos. Parimos hijos. Enterramos muertos. Amamos. Fuimos y somos amadas. Dejamos y nos dejaron. Nos enojamos para toda la vida, para descubrir que toda la vida es mucho y no valía la pena. Cuidamos y en el mejor de los casos nos dejamos cuidar.Nos casamos, nos juntamos, nos divorciamos. O no.

Creímos morirnos muchas veces, y encontramos en algún lugar la fuerza de seguir. Bailamos con un hombre, pero la danza más lograda la hicimos para nuestros hijos al enseñarles a caminar.

Pasamos noches en blanco, noches en negro, noches en rojo, noches de luz y de sombras. Noches de miles de estrellas y noches desangeladas. Hicimos el amor, y cuando correspondió, también la guerra. Nos entregamos. Nos protegimos. Fuimos heridas e inevitablemente, herimos.

Entonces…los cuerpos dieron cuenta de esas lides, pero todas mantuvimos intacta la mirada. La que nos define, la que nos hace saber que ahí estamos, que seguimos estando y nunca dejamos de estar.

Porque juntas construimos nuestros propios cimientos, en tiempos donde nuestro edificio recién se empezaba a erigir.

Somos más sabias, más hermosas, más completas, más plenas, más dulces, más risueñas y por suerte, de alguna manera, más salvajes.

Y en aquel tiempo también lo éramos, sólo que no lo sabíamos. Hoy somos todas espejos de las unas, y al vernos reflejadas en esta danza cotidiana, me emociono.

Porque cuando las cabezas de las mujeres se juntan alrededor “del fuego” que deciden avivar con su presencia, hay fiesta, hay aquelarre, misterio, tormenta, centellas y armonía. Como siempre. Como nunca. Como toda la vida.

Para todas las brasas de mi vida, las que arden desde hace tanto, y las que recién se suman al fogón.

COSTUMBRES


COSTUMBRES

Nos hemos acostumbrado hablar en silencio, como cuando ellos dormían al levantarnos por las mañanas.

No somos conscientes de que ya no están, pero cada rincón conserva su música, sus risas, sus voces.

Cada cosa que hacemos, esta pensada para el pasado, cuando ellos eran los reyes y nosotros solamente sus padres, atrapando sus sueños, haciéndolos nuestros, ahora nuestros pensamientos afloran olvidados entre sus ropas, y en sus cajones, donde pequeñas cosas quedaron al marcharse.

Sus póster del cine, Casablanca y los Hermanos Max descansan en sus paredes, junto a El Exorcista y todas las películas de terror, ahora moran a sus anchas en los dormitorios, sujetos con chinchetas a un marco de corcho, toda una vida en fotos, de cumpleaños, navidades y vacaciones.

Ahora haciendo reformas en la casa, los duendes vuelven a arroparse entre mantas y edredones, sin querer abandonarnos, sin permitirnos tener de nuevo nuestro espacio, el que ellos llenaron con su presencia, el que vuelven a llenar cada día que aparecen.

Y es que toda una vida con ellos, no se puede disfrazar detrás de cortinas nuevas, habrá que dejar pasar el tiempo, y llenar de nuevo los rincones de pequeñas presencias, y esas presencias ya son parte de mí.

VEN ENSEGUIDA...


VEN ENSEGUIDA...

Busquemos un lugar para entregarnos, un lecho, un techo, un querer, un ser, un amor, una vida… cabalguemos juntos.

Ven enseguida, besémonos los labios y los pechos, desprendamos los fluidos, cerremos los ojos y vuelve loca

Tengamos ese lugar, que  la piel sea parte de la noche,  la luz solo de tus ojos y deseo… mucho deseo.

Y ahora, cambiemos el mundo, la vida, y déjame ser yo, que nadie me grite, ni me causen llanto, déjame a tu lado…solamente  por que yo  te amo.


EN NAVIDAD



Dedicado a todas las personas que la Navidad es la llama que enciende aún más su soledad, sus pérdidas, sus desilusiones, …







Aferró la daga entre las manos
y apuñaló el latir de sus ilusiones,
una a una.
Se bañó en sangre blanca,
blanca como la muerte.
Amortajó los restos con su vestido rojo,
rojo como la llama,
y las enterró lejos de su tierra
-ni la pena asistió al funeral-.

Volvió sobre sus propios pasos,
transparente y vacua:
sus ojos sin luz,
su boca sin labios,
sus oídos cegados por el silencio,
su gusto insípido,
su tacto sin huella,
su espalda hundida,
sus piernas sin ritmo.

Naufragó en el tedio.
Vivió esperando al único amor que le restaba:
La dulce y eterna nada.

Mercedes Ridocci

NO QUIERO...


NO QUIERO...

No quiero escribir de sueños, ni de estrellas, de vientos, o de lunas, de sangre, ni de suspiros, de eso ya escribí antes,  pero hoy es otro tiempo, mi vida es otra vida, y mis noches ya no son tus noches.

Se quedo en mi, regalarte mil primaveras, mezclar los pensamientos como aliño para tus ensaladas, regalarte el olor de la mañana, y calentar tu ducha con mi aliento.

Coger tus manos con mis manos, que mis ojos siempre encuentren tu mirada, que mi pelo atado, lo desate la pasión de tus manos inquietas, mientras los cuerpos se deshacen como arena del desierto, perdiéndose en las dunas de la vida.

Que entrega y cuerpo sean lo mismo, que en mi cocina siempre haya los ingredientes necesarios para ser el alimento más amoroso de cada día, sin conformarme con darte mi vida cada noche.

ENFERMEROS


ENFERMEROS

Parecía un Skins, su cabeza rapada en una época que no estaba de moda, estaba mal visto, té hacia pensar en cualquier cosa, hasta verle en su trabajo, donde era ternura y dedicación, amabilidad y sonrisas.

Ella  me hablo de “el” la primera vez que la ingresaron, me decia... ya veras que agradable, siempre aparece con una sonrisa, y mi nombre en su boca como un regalo.

Mi Madre chapada a la antigua, jamás había dejado que ningún hombre la tocase después de marcharse mi padre, y sintió la ternura y el amor que él dedicaba a su profesión, y hacia olvidar a sus viejitos donde se encontraban.

A mí, al verle la primera vez, serio, ante una llamada desde la habitación donde ella permanecía ingresada, me hizo pensar que mi Madre había perdido la cabeza, hasta que le vi trabajar... entonces me rendí ante su sonrisa dedicada a mi Madre, y la mire haciéndola notar mi admiración.

Solo se elige una profesión así, cuando lo quieres dar todo, y la vida rutinaria no te lo permite, cuando tu amor por la vida es grande, cuando quieres compartirlo con las personas, cuando olvidas tus problemas, y haces saber a las personas que no están solas, y que pueden llamarte a cualquier hora.

No todos podemos hacer eso, no todos sabemos, no todos queremos, por eso, mi sensibilidad se pasea a flor de piel en los sitios, donde una sonrisa puede hacer feliz a una persona triste, y olvidar el dolor aunque solo sea un segundo, pero puede ser el ultimo segundo de una vida, y eso lo es todo en esos momentos.

Gracias enfermero, gracias a ti por salvar a mi Madre en sus tinieblas, por hacerla sentirse bien, y dedicarle la mejor de tus sonrisas.


SENTIR


SENTIR

Sentir... el lado oscuro de mi misma, ese lado que no mostramos, ese lado donde dejas de ser tu y solo haces caso a los instintos, donde de ti sale cada pensamiento oculto, donde se revela lo exterior con el interior, con lo profundo con el lado oscuro.

Ese lado que todos tenemos, donde el Sol se vuelve sudor, donde la Luna  es mujer, las Estrellas miradas y el Mar amante...

Donde quisiera ser poseída por tu Mar que me voltea y me hace retozar, donde entras y sales a tu antojo por todo mi cuerpo, donde cada mirada  es diferente y con todas las picardías de las estrellas te pido mas, te llevare al otro extremo del amor, donde entre sudor y besos, pasión y mordisquitos, sensaciones y placer te invito a quedarte, no te marches nunca.

Ámame así  hasta que la luz pálida de la  Luna agonice y se convierta en rojo atardecer, donde mi amante “el Mar” se olvide de las mareas  porque esta a mi lado, en ese lado oscuro que a ti  se te gusta ¿quien te retiene amor de llegar a mi vida y entregártela toda entera?

Mostrarte mis  caricias,  y mis besos que te buscan sin encontrar tus labios entreabiertos que me quitan la sed agonizante, donde ver tu cuerpo  a la luz de las velas es mi deseo mas oscuro, y esperar  “Al cartero que siempre llama dos veces...”  tomar mi postre en ti... y con tu ultimo beso en mis labios, y el olor de libertad de nuestro  cuerpos, regrese del fondo de tu Mar y seguir  esperándote, soñándote y amándote... siempre.

TIERRA VEDADA

Imagen sacada de google


La Dama arranca su encorsetada casta.
Exuda nácar la espiral de su concha rota.
Vierte el néctar oculto
sobre tierra vedada.

Mercedes Ridocci



 
TERRA VEDADA

La Dama arranca la seua encotillada casta.
Exuda nacre l'espiral de la seua clòtxina trencada.
Vessa el nèctar ocult
damunt de la terra vedada.
 


Traduïda al català per Pere Bessó





 Comentario de Pere Bessó adjunto a la traducción.

 
 
Querida Mercedes:
Recojo tu poema y lo traduzco. Un poema breve que, sin embargo, permite la ensoñación de lo erótico a través de una sensibilidad que parte a voluntad de elementos nobiliarios a través de un lenguaje culto y sin concesiones que hunde sus raíces en la poética trobadoresca. La Dama gentil y su encorsetada casta nobiliaria encuentran su símil y metáfora en el molusco. Fuera ya del tópico de la perla, la ostra y sus irisaciones, tú, amiga Mercedes, conservas, sin embargo, la atracción por la concha. La real y la simbólica. Y como quiera que ello es obvio tanto en el poema como en el propio discurso de la eroticidad y del ludismo, no cabe insistir en ello. Sos buena entendedora, que dirían mis amigos argentinos.  Y, a mayor abundamiento, la coherencia textual y asociativa lleva al goce de esa fluido de nácar oculto, como el derrame de la humedad más preciada. Una intimidad marcada en espiral, como la de la caracola marina, que rompe, al cabo, la naturaleza de su interioridad en sí misma. Un rompimiento, ay, en tierra prohibida, vedada. Terra nullius frente al hartazgo de la tierra prometida. Al fin el uso de la libertad frente al horizonte alicorto y demediado de las cartas marcadas. 
  

YO QUISE


YO  QUISE

Yo quise olvidarle tanto, que de tanto olvido le recuerdo a todas horas.

Y puse mi mente al son de la indiferencia, y se volvió contra de mi, dejando sus pensamientos dormidos junto a los míos insomnes, con un vivir sin sueños, y la fiebre siendo mi compañera hacia el recuerdo.

Quise pasear tus sentidos con mis manos, recordar la mirada azul de alegría, junto a la mía negra de distancia, y se quedo en una tarde gris para no olvidar jamás.

Yo recuerdo su sonrisa y sus manos, su voz, sus palabras de niño, y su sonreír constante, que hacia que mi vida se llenase de música, y mis noches de ausencias.

Con tantos tesoros cercanos, imposibles son los olvidos, y la brisa de tus abrazos, dejándome el cuerpo sereno, y el corazón ardiendo, y las palabras lejanas diciéndome, olvida, porque me hace daño su recuerdo junto a mi ayer, y el hoy ya sola.

TROZOS DE HISTORIA



 TROZOS DE HISTORIA

Pisaba trozos de la historia, de eso fui consciente desde el primer momento de mi llegada a Egipto, por que allí todo es eso…historia.

Y mi vida cambio de latidos, siendo más pausados y calidos, más sentimientos que miradas, mas cambiar comida por visitas, y descanso por sueños.

Mi visita a las pirámides de Giza fue un sueño echo realidad, había estado tantas veces allí desde mi casa, que cuando llegue llore, no puede evitar la emoción que me embargaba, y el sentir que había regresado a mi tierra de otras vidas. No pude notar sus ocho caras, eso se ve simplemente desde el aire, y no siempre, solamente bajo el efecto relámpago, que tiene efecto algunos días a ciertas horas solares.



Me aturdió el Cairo y su trafico salvaje, entre carros y calesas, entre mujeres y niñas tapadas sin medida, en un mes que el calor ya se hacia insoportable en sus calles, y las miradas a mis pantalones cortos era la envidia de las mujeres, y la alegría de los hombres.


Me gusto visitar sus templos, y mis ojos se llenaron de historias contadas, y maravillas por vivir, y volví al pasado, cuando las mujeres eran importantes en la comunidad diaria, ser madres un milagro, y los niños tan importantes como ahora.



Sentí que el tiempo no había pasado, y que Hatsepsut (el faraón de la XVIII dinastía) se paseaba como hombre siendo una mujer, y vibre junto a su piedras, en Deir el- Bahari, allá en su tumba, y templo, construido como símbolo de amor por su amante Senmut, que fue el amor de su vida, aunque jamás su marido.




Mi visita a la Mezquita de Alabastro de Saladino fue toda una sorpresa, llena de serenidad y silencio, donde sentarse a descansar de un día agotador en las alfombras de su suelo, y sus lámparas en su techo enorme, precioso y hospitalario.




Me gustaron sus zocos, pero NO sus mercados, llenos de todo, especias, frutas, animales vivos y muertos en sus puestos, ropa, y sobre todo… moscas. Pero aun así, todo resulto chocante y nuevo para mí.



Añoro el regreso, y quisiera volver a ver sus templos, su mar rojo, sus pirámides, pero sobre todo, volver a respirar su historia, que ahora se que es parte de la mía.



 

NO LLEGARAS



NO LLEGARAS

¿Sabes con lo que sueño? Con volver a oír tu voz, desde las fronteras del día y la noche, desde mi vuelta y tú olvido.

Pasear con mi alma en bandolera, por los paseos  oscuros del Parque del Retiro, oyendo las fuentes, dando de beber a mis sedientos ojos, con el palacio de cristal al fondo, sobrándome amor y ropa, en estos días de frio y sueño, entregando todo a la persona amada.

Y esperare con rabia el atardecer, sembrando ilusiones por los jardines, hartos de amores trasnochados y besos escondidos, de figuras retorciéndose en las sombras, mientras espero tu llegada,  y te deseo

No llegaras… lo se, pero esperare bañando mis ojos en el estanque, caminando  sola entre las gentes, haciendo  con tu voz la plegaria del día, pero... esperare.

NAVIDAD

Imagen de Lissy Ellen

“El recuerdo, como una vela, brilla más en Navidad”
Charles Dickens

¡FELIZ NAVIDAD!

Amanteceres

SE BORRO EL SURCO


SE BORRO EL SURCO

Muchas veces se borro el surco en mi camino, sin saber por donde dirigir mis pasos, si hacia delante, o simplemente detenerme a meditar, sentada en una piedra, mirando la ladera y las montañas, oliendo el verde y el hinojo.

Cuantas veces creí oír el canto de un pájaro, y pensé que su sonido era para mí, sin darme cuenta de la inmensidad del campo, y de que muchas mas personas podrían están oyendo ese hermoso trino, sin ser para nadie en particular, y para todos en general.

Pensé mas de una vez que la lluvia venia hacerme compañía, para que mis ojos no llorasen a solas, sin darme cuenta de que la lluvia cae para todos, y aunque sea difícil también en el desierto, y eso me hizo desgraciada.

Y ahora que no necesito ni surco ni camino, ni piedra para sentarme, ni pájaros, ni lluvia, ahora que prescindí de todo en la vida, desde ese momento, me di cuenta de todo lo que rodeaban mis días, y fui feliz de saber lo poco que necesito, y lo mucho que tengo, tanto es así que vivo rozando el paraíso, y solo mi miedo me impide dar el paso para estar en el.


QUIERO VIVIR CONTIGO


QUIERO VIVIR  CONTIGO

Quiero vivir contigo, llorar contigo, reír contigo, empaparme de tu sudor.

Quiero vivir contigo, quedarme con tus lagrimas, que repartas tus sonrisas, que te quedes a vivir en mis sueños.

Quiero pasear a tu lado, y ver cada mañana las  trescientas formas que tienes de sonreír, y que casi todas sean mías, pero no todas para que si quieres sonrías con otras…

Siempre quiero que cada una de tus  arrugas se hagan a mi lado, y cuando todo termine, que mis ultimas palabras, y mi ultimo suspiro sean para ti, aunque no me lo pidas.